Los renglones torcidos De Dios: Torcuato Luca de Tena

«El automóvil perdió velocidad.

-Creo que es aquí. – Dijo el hombre.

Movió el volante hasta salirse del asfalto. Detuvo el coche en una explanada de hierba; descendió y caminó unos metros hasta el borde del altozano. La mujer le siguió.

-Mira. -Dijo él, señalando la lontananza.

Desde aquella altura, la meseta castellana se extendía hasta el arco del horizonte tersa como un mar. Tan sólo por levante el terreno se ondulaba diseñando el perfil de unas lomas azules y pálidas como una lejanía de Velázquez. Unos chopos, agrupados en hilera, cruzaban la inmensidad; y no era difícil adivinar que alimentaban sus raíces en la humedad del regalo, cuya oculta presencia denunciaban. El campo estaba verde, pues aún no había comenzado el trigo a amarillear ni la cebada. Centrada en el paisaje había una sola construcción humana, grande como un convento o como un seminario.

-Allí es. -Dijo el hombre.

La tapia que rodeaba por todas partes el edificio estaba muy apartada de la fábrica central, con lo que se presumía que la propiedad debía ser vastísima. El cielo estaba diáfano, y las pocas nubes que por allí bogaban se habían concentrado todas en la puerta del ocaso.

-¿Qué hora es?

-Nos sobra tiempo.

-Estás muy callada.

-No me faltan razones.

Subieron al coche y lo dejaron deslizar, sin prisa, por la suave pendiente.

Las tapias vistas de cerca eran altísimas. No menos de cuatro metros. Algún día estuvieron encaladas. Hoy la lechada, más cerca del color de la tierra circundante que de su primitiva albura, caía desprendida como la piel de un hombre desollado. Llegaron a la verja. Candados no faltaban. Ni cerrojos. pero timbre o campana no había.

Bajaron ambos del coche a la última luz del día, y observaron entre los barrotes. Plantado a lo largo del camino que iba hasta el edificio, un individuo, de muy mala catadura, los observaba.

Corría el 04 de mayo de 2006 cuando cayó este libro en mis manos, en aquel entonces me costó 7,95€, por lo que veréis en su ficha ahora está algo más caro.

Veo, porque tiene un marcador al final, que lo terminé y veo, por las páginas dobladas que me debió gustar así asá.

La historia trata de una mujer, Alice Gould, que es ingresada en un sanatorio mental, -imaginas bien si crees que es la que va con el hombre en el coche, en el primer párrafo del libro- en su delirio cree que es una investigadora privada a cargo de un equipo de detectives dedicados a esclarecer complicados casos. Según una carta de su médico particular, la realidad es otra: su paranoica obsesión es atentar contra la vida de su marido. La extrema inteligencia de esta mujer y su actitud aparentemente normal confundirán a los médicos hasta el punto de no saber a ciencia cierta si Alice ha sido ingresada injustamente o en realidad padece un grave y peligroso trastorno psicológico.

Así es como se nos presenta el resumen de la historia, y bueno, así es, pero yo os contaré un poquito mas para que entendáis mi valoración de «regulero».

El señor Torquato, que escribía muy bien, también era conocido por que le gustaba que se notase en sus obras lo muchísimo que las había trabajado en su investigación anterior a ellas, eso nos lleva a tener parrafadas importantes que realmente no parece que vengan muy al caso, en forma de monólogos de la tal Alicia que yo, personalmente, a veces le tengo aprecio y otras muchas la estamparía contra una puerta por estúpida, marisabidilla, prepotente, altanera y homófoba -entre otras cosas-.

Hay que tener en cuenta que se dice que este señor se metió un tiempo en un psiquiátrico para poder documentarse bien de cara a la obra y que esta obra tiene mucho valor en cuanto a tipologías de trastornos y demás, eso hay que reconocérselo.

También hay que reconocerle que la historia en su primera parte, digamos los primeros capítulos y hasta casi mitad del libro, te enganchan y que es cierto que no tienes muy claro si la señorita está cuerda o loca, porque va cambiando «supuesta cordura» con «supuesta locura» capítulo a capítulo. Esto es, que el libro está muy bien escrito. Bueno, fue un best seller así que obviamente malo no es.

Pero llega un punto en que Alicia ya no me hace gracia, me aburren sus soliloquios de marisavidilla y la historia pasa de interesante a por favor que se termine ya y me quede así como vá, ni fu ni fa. No tengo recuerdo de un mal libro pero tampoco de un libro maravilloso, así que solo puedo concederle un regular.

¿Os lo recomiendo? pues no sé, hay que reconocer que se ven las cosas desde una perspectiva diferente, que el tema locura vende y atrae mucho y que ves regos del señor Torquato de clasismo, machismo y homofóbia que son, por decir algo, interesantes. Pero no sé, no me parece realmente un Best Seller, o al menos no es lo que yo tengo como un Best Seller.

Y diréis ¿y entonces por qué lo pones? porque ya sabéis que me gusta poneros de todo, cosas que me van gustando mucho y cosas que no y porque me gusta hacer una revisión de mi librería y ver que dono a las bibliotecas y que me quedo. Este lo dono.

Torquato Luca de Tena (Madrid 1923-1999) licenciado en Leyes, corresponsal permanente de prensa en Londres, Washington, Oriente Medio y Méjico, ex director del ABC , miembro de número de la Real Academia Española, publico su primera novela en Chile a los 18.

Desde entonces dedicó su vida al periodismo activo a la creación literaria. Sin desdeñar obras tan considerables como Los Hijos de la lluvia o La brújula loca, sus mayores éxitos los obtuvo con sus dos novelas Edad Prohibida y ésta.

Obtuvo números premios entre los cuales está un premio nacional de Literatura y premio Planeta.

• TITULO: Los renglones torcidos de Dios
• SUBTÍTULO: no tiene
• EDITORIAL: Planeta
• AÑO DE PUBLICACIÓN: 1979, mi version es de 2006
• ¿ESTA EN KINDLE?: no, aunque seguro que en PDF lo encuentras por la red.
• PRECIO: en tapa blanda unos 8,50€
• DONDE LO COMPRO: en amazon, en la casa del libro…