Como he contado ya en alguna ocasión, en el cole de mi hija promueven constantemente el tema del reciclado y la reutilización, hasta el punto de que a ella, que le encanta hacer manualidades, no se le escapa ningún rollo de papel, caja de cereales, bote de yogur de beber, tapón etc. Todo pasa por sus manos y termina convertido en cualquier otra cosa que se le haya pasado por la imaginación (y ya sabéis como es la imaginación de un niño de cinco años…).
Hemos hecho mil cosas en casa, desde el portal de Belén, hasta un casco de astronauta (que para el hijo pequeño siempre será un cabezudo…jajaja).
Los que tenéis niños sabéis o sabréis, mas tarde o mas temprano, lo que son las colecciones de muñequitos que vienen en sobres sorpresa. Hay de duendes, dinosaurios, insectos, bebes, hadas, princesas, monstruitos, coches, gatitos e infinidad de cosas más, así que, si estas pensando que tu no caerás en esas colecciones infinitas, no estés tan segura…
Mi hija mayor empezó unas cuantas. No a la vez, pero como sólo le dejo comprar un sobre por fin de semana (cuando veáis los precios lo entenderéis) nos eternizamos bastante y, al final, siempre sale otra colección que le hace cambiar de rumbo.
Un día puso todos sus muñequitos en una caja pequeña y me dijo “mama, no caben en la cajita ya, necesitan una casita mas grande”. Y ahí se me ilumino la bombilla y se me despertó de nuevo el espíritu artesano, que tenia apartado desde el nacimiento del hijo pequeño, tenía que hacerle “una casa para mis muñecas“.
Y allá que me fui a por unas cajas de cartón, a embarcarme en la aventura de convertirme en arquitecta y constructora de la futura vivienda de los mini muñecos de mi hija.
Diseñe en una hoja la forma y las proporciones que quería para la casa. El diseño, ni muy clásico ni muy moderno. Y después hice una lista de lo que necesitaba.
Qué materiales necesitamos?
- Cajas de cartón
- Celo
- Tijeras
- Cuchilla o cuter
- Pistola de silicona
- Cola blanca
- Papel Kraft
- Impresora y ordenador
- Etiquetas autoadhesivas tamaño A4 (o en su defecto folios y cola blanca)
- 10 cm de velcro de pegar
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Comenzaremos dando forma a las cajas.
Paredes exteriores, divisiones interiores para las diferentes habitaciones de la casa y zona de buhardilla.
Ahora entra en juego el papel autoadhesivo, el ordenador y la impresora.
Busqué en la red fondos que me gustasen para los diferentes cuartos, un tejado, puertas y ventanas y los imprimí en las etiquetas para facilitar la tarea de pegarlo luego en la caja, pero puedes simplemente utilizar folios normales y cola blanca.
Después de tener las paredes de los cuartos empapeladas me centro en las divisiones interiores, es decir, suelo de los pisos superiores y paredes interiores, las cuales pegue en el centro con celo formando un “+” y forre posteriormente con sus respectivos colores (papel de habitaciones, baño, y suelos). Una vez empapelado todo lo pego en la estructura de la casa con la pistola de silicona.
El siguiente paso es abrir las puertas de las habitaciones y de las escaleras con la cuchilla (y con cuidado). Y por dentro, a groso modo ya esta lista la casita.
Comenzamos ahora con la fachada para lo cual utilizamos el papel kraft y la cola blanca: Encolamos las paredes y las forramos con el papel, con cuidado de que no queden arrugas (ardua tarea).
Cortamos el excedente de papel con la cuchilla para que quede lo mas aproximado posible al borde, y todos estos bordes en los que el cartón queda un poco a la vista los sellamos con celo, para que no quede áspero y rugoso, un poco más curioso y lo más importante, no queden zonas por donde poder despegar el papel impreso.
Luego vamos recortando del papel adhesivo las ventanas y el fondo para el tejado y comenzamos a pegar una por habitación.
Vamos ahora con lo que será la tapa de la casita y al mismo tiempo la zona de jardín.
Marcamos con la propia casita la silueta en cartón. Si tienes un trozo grande de cartón no será problema. En mi caso solo me quedaban dos trozos y tuve que pegarlos con celo para poder marcar. Sobre lo marcado añadimos 1 cm más para q cierre lo suficientemente holgada, y después 5 cm más para que hagan de borde, como en cualquier tapa de una caja normal. En las fotos lo podéis ver.
Forramos la parte exterior con el papel kraft, de la misma manera que la fachada exterior, y seguidamente pegamos la puerta principal y las ventanas.
Después forramos la parte interior, lo que será el jardín, con el césped que imprimimos en las etiquetas autoadhesivas. Yo como detalle pegue también una pequeña piscina, fue una petición especial de mi hija, que entre sus muñecos tiene dos sirenitas que necesitan un poco de agua para vivir.
Cuando ya tenéis esta parte lista solo queda pegar con la pistola de silicona el borde inferior del jardín a la parte inferior de la casita, para que quede a modo de tapa.
Por ultimo pegamos a ambos lados 5 cm de velcro de pegar (aunque sea de pegar yo le puse también un poco de silicona por si las moscas), para que la tapa se sujete cerrada.
Resultado final
Espero que os haya gustado!
No es como una casita comprada, pero como pro tiene el hecho de que la diseñas como tu quieres y el valor que tus hijos le dan es mucho mayor!