Si la última vez os acompañé en paseo a caballo hasta Brañagallones hoy me apetece llevaros de fin de semana hasta el interior de Somiedo, a los lagos, a las brañas, a la reserva de la biosfera, a uno de esos sitios a los que estaremos deseando volver. Otro más de los muchos que tenemos, por suerte, en Asturias. Y es que no hay nada mejor para un fin de semana que perderse en Somiedo, concretamente en Valle del Lago.
Valle del Lago está a unos 11 kilómetros de la capital, Pola de Somiedo y desde allí accedemos al pueblo. A la Pola es fácil llegar desde cualquier sitio de Asturias (AS 227) y está bien hacer allí una parada para tomarse algo y disfrutar del entorno. Es todo muy rural y muy turístico. Para subir al Valle tenemos que cruzar literalmente la Pola y empezar el descenso por una carretera empinada y sinuosa que, en invierno, suele estar nevada pero que limpian a menudo. Nosotros fuimos por primera vez en el año 2011 con motivo del final de una etapa de la vuelta ciclista a España en La Farrapona. Por supuesto, fuimos a caballo y al terminar la jornada nos bajamos, contemplando el espectacular paisaje de los Lagos de Saliencia y quedamos en El Valle a cenar y dormir. Desde entonces es raro el año que no volvemos porque nos sentimos como en casa. Yo voy a describiros nuestros fines de semana en sitios muy concretos pero en El Valle hay otros igual de buenos y accesibles que podéis encontrar en internet.
Mi propuesta es pasar el fin de semana, con o sin niños, caminando, montando a caballo, comiendo, bebiendo y departiendo con los amigos. Sabréis que llegáis al Valle porque la entrada ya es espectacular, junto a un pequeño lago y una casita de ensueño. Poco más adelante esta la casa de apartamentos en la que nosotros nos hospedamos: Apartamentos Cobrana. En cada apartamento caben holgadamente cuatro personas y están equipados con todo lo necesario. Solo tendríamos que llevar la comida en caso de que no queramos gastar en restaurantes. Yo me llevo únicamente los desayunos para todo el personal porque para cenar y comer nos encantan los productos locales y también tiramos de la misma familia, los Cobrana. Veréis, en los apartamentos nos atenderá estupendamente Vita, un encanto de mujer más dispuesta que una madre y a la que le hemos cogido muchísimo cariño.
Y como el plan es montar a caballo, llamamos a su marido Benjamín (Rutas a Caballo Cobrana) que pondrá a disposición los que pueda sin traba de ningún tipo y además, si no estamos dispuestos a irnos solos, nos organizará unas rutas estupendas y aptas para todo tipo de jinetes. Y para rematar, cenando o comiendo como pepes, reservamos (hacerlo al llegar por si acaso) en el restaurante de otros miembros de la familia Cobrana. Casa Cobrana tiene muy buena comida a un precio también muy razonable. Es todo casero y hecho con mucho mimo y por la zona en la que estamos nosotros cenamos siempre sopa (buenísima porque casi siempre hace frío cuando llegamos por la noche), cabrito con patatas, uños o manos de cerdo y embutidos. Los escalopines al cabrales también riquísimos. He de decir que cenamos y desayunamos alguna vez en el Hotel que hay en El Valle y que también nos encantó, todo, la comida y el trato.
Una vez resuelto el tema del alojamiento y la comida nos vamos a divertir. A caballo, hay varios sitios para hacer rutas pero ya digo que nosotros cuando no llevamos los nuestros, contratamos los servicios de Benjamín y elegimos ruta. Por ejemplo, para el sábado, nos vamos hasta el Lago del Valle. Famoso de por sí, ahora lo es más si cabe porque dos marcas de ropa femenina muy conocidas grabaron allí varios spots de temporada. Se accede por pista muy cómoda tanto para ir a caballo como caminando. A caballo no nos lleva dos horas y el paseo es precioso. Otra posibilidad es que la estancia coincida con alguna fiesta en el alto de la Farrapona y también Benjamín os organizará la ruta, aunque es mucho más larga y cansada pero pasaréis por los lagos de Saliencia, como dije al principio, y es algo precioso y único. Las posibilidades son muchas dependiendo de lo que cada uno esté dispuesto a hacer y a pagar, claro. Después de la ruta unas cañitas, por ejemplo, un paseo por el Valle y la cena.
Y para el domingo, por seguir con los caballos, nos podemos ir a braña Sousas, a 1.500 metros de altitud desde El Valle. Otro sitio espectacular y muy llevadero el camino. La braña la forman unos corros o cabañas de pastores de los antiguos vaqueiros de alzada y se conserva en buen estado. De paso veréis por todas partes teitos bien arreglados y, con suerte, algo de la fauna del parque natural de Somiedo, como águilas o rebecos porque aunque hay lobos y osos, no creo que se de la circunstancia ni que a caballo os fuera a gustar la experiencia.
Nosotros hicimos esas rutas y disfrutamos también de la subida a la feria de septiembre en el puerto de Somiedo y bajada posterior, a caballo, con las vacas que vuelven de regreso al Valle. Inolvidable. Aunque ésta ya es para cuerpos entrenados pero todo es animarse. ¡Ah! Y que el mal tiempo no os eche para atrás. Un fin de semana que se preveía malo dejamos nuestros caballos y nos fuimos dispuestos a pasarlo comiendo y bebiendo pero resulta que nevó el sábado y el domingo salió el sol, lo que nos permitió alquilar los caballos allí y hacer la ruta al Lago más hermosa que hice en mi vida. Os dejo fotos. Y ya me contaréis si lo conocéis o si os pica el gusanillo y vais.
y la página de somiedo, donde encontraréis todo tipo de información.
Espero que os animéis a ir porque merece mucho la pena.[/dt_quote]