Sesiones fotográficas: embarazo y new born

Tenía pendientes estos post que al final he decidido hacer en uno solo, las sesiones fotográficas: embarazo y new born.

La cosa es que estaba esperando a publicar la sesión de autorretratos de embarazo en un blog de fotografía pero ya me han avisado que “con la gran afluencia de post” igual tardaba en salir o ni salía… en fin, déjate tu horas y horas planteando un post para otro blog, con una visión un poco más aséptica, pactado de ante mano para que al final te contesten esto… no hay seriedad ninguna pero en otra no me pillan.

Total y resumiendo, que lo subo yo porque no quiero que quede fuera de mi apartado de fotografía y porque quizá a alguna embarazada le apetece hacerse el recuerdo a si misma.

A ver, no soy yo una entendida, ya lo sabéis, aficionada pura y dura, pero bueno, desde mi pequeña experiencia voy a ir comentando las dos sesiones.

La de embarazo pasa por varias fases, por un lado unas fotos a contraluz, por otro unas fotos de estudio y por otro unas fotos en la calle, todos son autorretratos realizados con el disparador del móvil o el temporizador de la cámara, sin ayuda y alguno incluso sin trípode (los del campo de amapolas).

La sesión new born de LittleH más de lo mismo, las saque yo, sola y sin ayuda, nos falta sesión de familia y con Luci pero no se yo para cuando será eso porque Helena ya está muy grande y no se queda tranquila quita dormida ¡habrá que pensar en otra cosa!.

De las poses de su sesión en bolingas solo tengo una, la pose taco -pie bajo el codo- no la tengo porque no le gustaba nada, lo intenté varias veces pero cada vez que intentaba subirle así la pierna lloraba así que la dejé estar, bueno, tengo fotos para el recuerdo que es lo que cuenta.

Cuando me quedé embarazada de mi segunda hija tenía claro que quería guardar un recuerdo especial tanto del embarazo como de sus primeros días. Esto no pude hacerlo con la primera, ya que mi control de la cámara era bastante pésimo así que tenía que resarcirme.

En este pequeño artículo voy a contarte cuales son las fotos de embarazo que debes tener para el recuerdo, esas instantáneas que luego a todas nos gusta poner en el álbum e incluso, alguna en grande en la pared del baño ¡porqué no!.

Lo primero que debes saber es que todas las fotografías de las que vamos a hablar son autorretratos realizados con una cámara Olympus OM-D EM 5 Mark III.

Creo que toda embarazada debería tener un recuerdo de su barrigota, si bien en mi primer embarazo me saqué fotos de ella cada mes y mi hermana las unió con otras fotos hasta montarme un álbum, me di cuenta de que no era tan interesante para mi tener esa evolución del crecimiento de mi barriga, ahora bien, si eres una mamá primeriza igual es interesante que te las hagas.

Para ello te recomiendo que busques un lugar tranquilo y con un fondo neutro, una pared blanca y tú con ropa oscura puede ser una solución fácil y resultona. Busca llevar siempre la misma o muy similar para que la serie de fotografías quede equilibrada y elige una postura de perfil, con una pierna un poco elevada (como de puntillas) para que quede más estética, sobre todo lo notarás cuando la barriga vaya creciendo en envergadura… y tus muslos.

Si tienes el pelo suelto lo mejor es que te lo recojas o que lo dejes caer sobre el lado que sale en cámara, dándole algo de protagonismo y quitando hierro a la foto, para mi lo mejor es un recogido así todo el protagonismo recaerá en la barriga. Busca ropa discreta porque si te pones un sujetador y una braguita lencera no vas a conseguir una instantánea de tu barriga sino una foto “sexi” que para nada es lo que andamos buscando.

Semana 28 de embarazo, en ese momento la panza va tomando esa forma de balón incómodo, ya no te ves bien los pies, no llegas a atarte los cordones de los zapatos y lo de depilarse se convierte en una odisea. Es en ese momento en el que tenemos que actuar. Creo que el momento idóneo está entre la semana 28 y la 32, si bien es cierto que en las semanas 36-38 es cuando tienes mayor y más redonda la barriga, también lo es que ya estás demasiado pesada como para lidiar con un autorretrato y estamos partiendo de la base de que vamos a sacarnos las fotos solas sin ayuda de nadie.

Yo comencé por las sesiones en exterior, concretamente me centré en una temática, la primavera, porque mi segunda hija tiene prevista su salida para el 01 de agosto y la primavera era el momento ideal para, ya teniendo una bonita barriga, aprovechar largos vestidos floreados y campos rebosantes de vida. Si eres de invierno puedes hacer una serie bastante interesante en la nieve, donde tu cuerpo en mallas negras destaque sobre el fondo blanco de la nieve.

En mi caso utilicé un tripode, disparé con la aplicación que Olympus tiene para móvil (si, así a lo loco, sin ver ni nada) y desde una distancia de unos…150/200 metros de cara a que saliera de mi al menos de rodilla para arriba.

En cuanto a vestimenta te recomiendo que elijas alguna prenda en la que sobresalga tu barriga y que contraste al menos en parte con el fondo. ¿El pelo? Yo me lo dejé suelto pero como tu te veas más favorecida.

La postura: perfil, para que se aprecie lo más posible la barrigota y elevando un poco una rodilla para que no sea tan plana y estática, puedes optar por sonreírle a la cámara o mirar con amor hacia tu barriga y te recomiendo que te la toques, la mejor forma es poner una mano por debajo como si la sujetases pero intentando que se vea la mano y no sólo las puntas de los dedos, que quedan raras. Si llevas vestido o una camisola esto es especialmente importante porque sino no se va a apreciar si tienes mucha o poca.

Con la otra mano puedes posarla en la parte superior de la barriga o ponerla también por debajo. Juega con diferentes poses hasta que encuentres la tuya, yo tuve que hacer como unas 10 fotos hasta encontrar la que me parecía más estética que, si te fijas, no es de perfil total en esta serie sino que miro un poco a cámara, sesgadamente.

Un vestido largo en un campo lleno de flores es un acierto asegurado, luego puedes jugar con complementos pero intenta que no destaquen en exceso y acabes teniendo una bonita foto en un campo en vez de una romántica foto de tu barrigota en medio de la primavera.

Para darle más dinamismo y aprovechando la época yo hice varias tomas, dos de ellas fueron más alejadas, a unos 300 metros de cámara más o menos y salgo en un campo de amapolas a rebosar, aproveché que estaba de viaje y estaban a tope para hacer la serie y me quedé con dos, una en la que todo el protagonismo es la embarazada en el campo de amapolas y otra más dinámica en la que lanzo unas cuantas al aire.

Buscaba las fotos del campo de gramíneas con mi vestido de flores pero reconozco que las del campo de amapolas quizá son más especiales aun por la temporalidad que adquieren.

Las fotos “de estudio”, en este caso hice una investigación bastante grande en instagram y Pinterest sobre todo buscando esa foto estética ligera de ropa que dejase ver mi barriga sin parecer pornográfica. Y me decanté por 5 aunque tengo 6.

Necesitarás para ellas varias cosas: una ventana, buena luz exterior, un top negro con una braguita negra o un culotte, una camiseta negra o una especie de mono y una bata negra. 

Bien, pensar que todas estas fotos no las hacemos de estudio sino en plan casero, no vamos a utilizar parasoles ni luces de estudio ni fondos de estudio propiamente dichos sino cosas que tengamos un poco “a la mano”.

Además de la ventana con luz vamos a necesitar el trípode, un flexo algo potente y regulable en posición y un fondo oscuro, puede ser una pared oscura, una tela/sábana oscura o, como en mi caso, un fondo vinílico de color negro, ya ves donde está el quid de la cuestión, convertirnos en el centro de atención y que el fondo sea lo más oscuro posible, aunque luego con edición todo se puede resaltar, obviamente. Además vamos a hacer otra foto para la que necesitaremos un espejo de cuerpo entero o 3/4 y algo donde apoyarlo.

La primera de las tomas que realicé fue una foto simple de silueta en la ventana, aquí os comparto una de ellas y tengo una de la silueta propiamente dicha, acentuada en edición subiendo bien los negros y quitando algo de altas luces para que no se viera el fondo muy quemado pero sin tocar los blancos que verás después porque la saqué para tener la misma pero con bebe en vez de barriga. Recuerda que el enfoque debe estar en la parte de luz, o sea que no va a enfocarte a ti directamente sino a la ventana, colócate bien pegada a ella para que salgas totalmente nítida, si te quedas muy adelante igual pierdes nitidez en la zona más adelantada.

En este caso opté por una camiseta negra ajustada para marcar bien el contorno de la barriga sin que absolutamente nada más se interpusiera, y un moño en el pelo para darle dinamismo a la foto pero sin perder el enfoque en la barriga, que es lo importante.

Piensa en esta foto como un principio y no como una foto en si misma terminada ya que te falta la segunda, la del bebé.

Aquí ves cómo quedaría sin haberle subido los negros y haberla traspasado a blanco y negro, yo le quise dar un tono vintage acentuando un poco verdes y amarillos, creo que queda muy dulce.

Las demás fotos las vamos a hacer en ese fondo negro del que hablamos, todas excepto una de ellas. Reconozco que no quedó exactamente como esperaba ya que encima tuve un pequeño intruso pero creo que es interesante que la veas como ejemplo de otra opción a la foto de antes y después en silueta.

En este caso me puse la bata con el top negro y un culotte negro, probé la versión pelo suelto y sujetador lencero pero no me convencía, creo que era más sexi que representativo y la descarté.

Coge el espejo del que te hablé anteriormente y ponlo en el suelo, a unos 30 o 40 cm de donde te vas a poner tu y de lado, apoya algo por detrás intentando que no salga en plano o luego bórralo, puedes hacerlo con snapseed con el quitamanchas si no es mucho o con Photoshop si sabes usarlo bien.

Lo que tienes que controlar es que lo que la cámara vea sea tu reflejo en el espejo, todo tu cuerpo, barriga brazos y cara, eso es lo más importante y realmente lo único. Una vez tengas eso controlado, para eso lo mejor es que la cámara tenga Live View y la pantalla sea abatible para darle la vuelta e ir en distintas posturas probando hasta verte en el espejo.

Yo opté por ponerme de rodillas en el suelo porque mi espejo no era muy grande y no quedaba bien de pie, pero puedes hacerla de pie si tu espejo y tu habitación lo permite. Busca que el fondo sea blanco y neutro, que no haya absolutamente que entorpezca la toma, solo tu y el espejo. En mi caso tuve un intruso, mi perro Curro decidió que él también quería salir en la sesión de fotos y la verdad es que probé un par de tomas con él y sin él y al final me decanté por dejarle en ellas. Lo que hice fue acercarle a la barriga de forma que no sale en el reflejo pero si la fotografía.

La idea de esta toma es que luego hagas una doble exposición, al igual que la foto de silueta en la ventana vas a tener que hacer exactamente la misma foto (o casi idéntica) cuando nazca el bebé, te lo pones en brazos, entre tu pecho y tu barriga y miras al espejo, de forma que luego en edición lo que haces es coger ese reflejo y ponerlo en la primera fotografía obteniendo una toma divertida en la que cuando miras la foto ves a una embarazada y cuando miras el espejo ves a una mamá, reconozco que me dio una pereza bestial hacer esta toma y al final se quedó en el olvido.

Para terminar vamos a hacer 3 fotos más, realmente son 1 sola aunque en distintas poses y con diferente edición, para que tengas un poco de variedad y yo aquí te he subido dos de ellas, no las 3.

Ahora si que cogemos nuestra bata negra, yo usé una de raso con caída, busca algo así. Ponemos nuestro fondo negro, si es una manta o sábana estírala lo máximo posible con pinzas en la parte de atrás del sofá, un mueble alto o pégala a la pared con cinta de carrocero fuerte. Busca siempre que la cámara enfoque el centro y no tener que recortar mucho los lados, así te será más sencillo controlar que no está torcido el fondo.

Pon el flexo en el suelo, si es pequeño usa una banqueta o unos cuantos libros y ponlo encima y enfoca con él hacia arriba, tu vas a situarte por delante del foco pero sesgadamente, el foco va a iluminarte de lado no directamente. Por intentar que me entiendas, tienes el fondo, el foto ilumina el fondo pero no directamente sino de lado y tu estás ahí a la altura del foco lo que hace que te de luz pero no tanta como si te enfocase directamente a ti. 

Te diré que yo probé a situarme entre el fondo y el foco y por delante de ambos y al final las tomas que me parece que quedaron más bonitas fueron con el foco iluminando el fondo pero de lado para que me diese a mi también.

Al ser el foco pequeño tuve que agacharme un poquito, no obstante la postura hace que la foto tenga movimiento y quede muy bonita, en mi opinión. Controla la postura como hablamos en las anteriores tomas, de perfil, en este lado no te pongas de perfil total sino mirando un poquito a cámara para que el foco te dé en lo que sería más menos el ombligo, agacha un poco la cabeza mirando a tu barriga y pon las manos alrededor de la misma, recuerda lo que te comenté de los dedos, mejor mano que dedo, pósala bien sobre la barriga, puedes tener las dos abajo o una abajo y otra arriba como si la cogieras o ponerlas a los lados, de esa forma y de perfil sólo verás una mano, intenta que se vea estirada pero no demasiado tensa.

Al mirar hacia abajo harás que el foco te de tanto en las manos y la barriga como un poco en el cuello y la cara, igual tienes que ladear la cara un poco hacia cámara para que no te haga sombras raras. Haz varias tomas, yo las hice así:

Con la cámara en el trípode, live view activo y la pantalla totalmente al revés para poder ver un poco lo que salía, conecté el temporizador a 20 segundos y a que hiciera 5 fotos cada 5 segundos más o menos, iba variando insignificantemente mi postura para ver diferencias y éstas son las tomas con las que me quedé.

Quiero recalcar que en ningún momento utilizo un flash ni externo ni de la propia cámara, sólo el flexo. Probé con el flash externo pero era un jaleo para hacer una sesión de una hora corta en plan casero así que lo deseché.

En la toma con la luz detrás estaba totalmente tapada con la bata pero la aparté en la zona de la barriga, volviendo a tapar la pierna y dejando la mano allí. En edición prácticamente no toqué nada, bajé un poco el contraste (en todas) y acentué los blancos pero no toqué color ni mucho los negros, lo justo para que quedase en sombra lo que debía quedar.

La del perfil extremo la edité en blanco y negro, la luz está algo más alta y yo saco un poco la rodilla más cercana a la cámara para que se vea un pelin de pierna bajo la barriga, dejé la sombra que hace la propia luz en la barriga porque me gustó mucho el efecto de la mano enfocada, bajé mucho los blancos resaltando barriga y cara expresamente en edición y subí los negros para que nada más apareciera en la toma.

Y con esto y un bizcocho nos vamos a ver a LittleH en acción.

No os voy a dar aquí una clase magistral, para eso están los cursos de fotografía de bebés, yo me hice uno de Jessica Davey que me encantó en Helio Creatividad, ya no está en cartel pero tienen otro de otra chica que tiene buena pinta, por si os interesa.

Yo paso a comentaros lo que usé yo así rápido y ya porque si tengo que explicaros cada cosa tendría para un curso entero.

Materiales:

en mi caso como era pleno agosto y en mi casa hace bastante calor no utilicé ningún tipo de calentador de aire pero os recomiendo que lo tengáis. Maorlan os recomienda que pongáis guantes de esos blancos tipo papa Noel para que el bebé no sienta las manos frías, yo no los usé pero por el mismo motivo, yo hice la sesión en pelotas casi del calor que hacía en casa.

Os recomiendo que os pongáis bajo una ventana pero que intentéis que la luz que entra por ella sea difuminada o buscarle postura porque sino las fotos os van a quedar super planas y eso no mola.

Usar un puf o algo similar donde posar al bebé para las poses, meterle bastante mantas y entre la última capa y la siguiente (ultima me refiero a la capa que uséis de base de las fotos) meter un par de empapadores tipo pis de perro o pis de bebé porque si, las probabilidades de que se os meen son grandes. Tener otras mantas a mano para hacer el cambio, claro.

Yo usé un puf de más o menos 1 metro por 60 de alto, redondo, de piel, lo compré en una página especializada en cositas de bebé y vino desde América, viene el puf luego el relleno (las bolitas) las compras aparte en Amazon que te cuestan dos duros. No llenéis el puf hasta reventar, dejarlo al 80% más o menos para que el bebé quede como posado pero con cuerpo.

Usar una manta de base que sea bonita y que tenga algo de textura para que se note en la foto. Yo os recomiendo Zara Home que tiene divinidades tanto pequeñas como grandes, en rebajas sobre todo tienen buenos precios.

Subí el puf a una mesa sensorial de Ikea para que quedase más a la altura de la ventana, ojo donde lo ponéis no se os vaya a caer el bebé.

Prepararlo todo de ante mano, tener a mano kleenex por si se mea (porque las toallitas al estar húmedas igual lo despiertan) y toallas para contener el pis.

Preparar la caja, en mi caso metí un par de mantas abajo y luego un conjunto tipo nest que es un rulo con agujero en medio, tipo cojín de lactancia pero cerrado por abajo y viene con tres almohadas minúsculas para meter dentro, además le metes una mantita y listo. Comprueba que todo lo que metes queda más alto que la caja porque luego el peso del bebe hace que baje todo un poco y así tendréis fijo que el bebé no se quedará “ahogado” dentro de la caja.

La manta dejarle un lado un poco con caída, para que tenga cuerpo y movimiento en la foto y no queden planas.

que más…

Preparar el trípode y los objetivos ya con todo listo para que sea quitar y poner, si además tenéis varias cámaras mejor que mejor, yo tenía el 50mm macro montado en la Nikon para detalles y el 35 en la Olympus, además ahí variaba con el 50mm que no es macro y tiene mucha luminosidad. No sé deciros con qué cámara saqué mejores fotos, creo que un 50-50.

Tener un escalón preparado por si queréis hacer alguna cenital o picado no tener que ir a por él.

Tener un gorrito a mano o alguna prenda que os haga especial ilusión que salga con ella para el recuerdo, yo usé tres gorritos aunque uno de ellos lo descarté por ñoño en extremo.

Tener también una mantita con textura para detalles, por ejemplo con hilos para envolver los pies del bebé y sacárselos, o con algo de trama para sacarle las fotos de frente sin que se le vean sus partes o el codrón si, como en mi caso, aun no se le ha caído.

Creo que no me dejo nada pero comentarme si veis que os falta algo ¿vale?

Lo que vamos a hacer es ir poniendo al bebé en las poses que queremos para la foto, yo os recomiendo que abráis un panel de pinterest y vayáis metiendo ahí lo que os guste, así luego podéis “copiar” la pose. Tener cuidado al mover al bebe, prepararle las piernas todo lo que podáis en vuestro pecho (puesto el bebe en modo rana contra el pecho) antes de posarlo porque luego será complejo. Si veis que al posarlo se quiere mover un truco es apretarle un poco en la espalda mientras le canturreáis o le hacéis ruiditos para que se relaje.

Ah! ruido blanco, imprescindible para que no se despierte con el ruido de la cámara sacando las fotos o con los cambios de postura.

Acordaros de tener con vosotros también un par de toallas o paños pequeños para poder modificar correctamente las poses, para que el culo no quede muy alto metéis una por debajo del primer nivel de mantas bajo la cabeza y así vais poco a poco modificando a placer hasta que la postura quede correcta. No lo peguéis mucho a las esquinas porque os saldrá el fondo y la cabeza cortada por él y es un dolor.

Os dejo con imágenes, las ultimas son las únicas que me saqué con ella recién nacida, ¡suerte que me dio para sacar esas porque no tengo ninguna más! ya se sabe que basta que estés normalmente detrás de la cámara para que no salgas nunca… un horror, vaya.

Espero que os gusten.